8.09.2014

Princess Mononoke

Esta es la novena película hecha por Studio Ghibli y es una historia de fantasía y aventura épica de período escrita y dirigida por Hayao Miyazaki con Toshio Suzuki como productor. La película salió a los cine japoneses en 1997 y a los estadounidenses en 1999. Fue la película más taquillera en Japón en 1997 y había sido la película más taquillera en general hasta la llegada de Titanic (que luego fue superada por la película de Miyazaki, Spirited Away, la siguiente de Ghibli que criticaré). A pesar de haber sido superada, su éxito en el oeste llegó gracias a las ventas de VHS y DVDs que pusieron a Ghibli en el mapa para la audiencia estadounidense.
La historia ocurre a finales del Período Muromachi (entre los años 1337 y 1573), muy conocido por las guerras territoriales y el interés renovado en el Shintoísmo. Este cambio es histórico, ya que en el presente la religión Shinto es la más grande en Japón. Antes de este cambio, el Shinto casi fue absorbido completamente al Budismo, pero debido a los conflictos que surgieron con China e India crearon la necesidad de reforzar su identidad nacionalista con el concepto de que el emperador era una deidad y que históricamente la naturaleza divina de Japón y su espiritualidad eran supremos por sobre los dos países rivales. Esto enriquece a la historia con elementos históricos reales, las guerras territoriales que sucedían al mismo tiempo que más creyentes regresaban a las creencias en los espíritus y los dioses de la naturaleza y su influencia en el mundo terrenal. Este conflicto se encarna perfectamente en la existencia de San, la llamada Princesa Mononoke, un término que significa espíritu o monstruo. También es interesante ver la existencia de los Emishi en la película, quienes en vida real sí fueron una tribu aislada en Japón por haber desarrollado su propio lenguaje y, en general, su propia cultura. Tal y como en la realidad, este pueblo aislado fue sometido a cambios forzosos que ocurrieron en todo Japón.
La historia, en resumen, trata de Ashitaka, el príncipe Emishi, quien es enviado a resolver la guerra entre los dioses de los bosques y los humanos que consumen el bosque para obtener los recursos que "necesitan". Todo comienza con un dios del bosque llamado Nago, un jabalí enorme, que está cubierto por lo que podría interpretarse como la encarnación de la corrupción que lo está matando lentamente y lo ha convertido en un demonio. Nago corre hacia la aldea Emishi y Ashitaka pelea contra él para detenerlo, lamentablemente, el brazo derecho de Ashitaka entra en contacto con la corrupción que infecta la piel de Nago y su brazo queda maldita. La infección le deja una cicatriz que lentamente se esparcirá por su cuerpo hasta lograr matarlo, pero a la vez, le otorga poderes sobrenaturales de un demonio. Por ser infectado por un demonio, Ashitaka es exiliado de su aldea, pero le informan que han encontrado una bola de hierro dentro del jabalí. Sabiendo que esa fue la causa de su muerte y su conversión y ahora el deber de él es viajar al oeste, de donde venía Nago, e investigar qué sucedió y tal vez encontrar una cura a su maldición.
Kodama
Me pareció algo cruel que los Emishi tuvieran que sufrir por la falta de respeto de otros pueblos, pero eso en verdad pudo haber pasado. A pesar de esto, lo más sensato era enviar a alguien que en verdad siguiera respetando a los dioses para poder ser el mediador perfecto para detener el conflicto.
Más adelante, me encantó la primera aparición de los Kodama (espíritus de los árboles).  Esos personajes están entre lo más populares de Miyazaki que se han vuelto icónicos de entre sus películas. Ahí también podemos ver por primera vez la manera de pensar de los humanos que han declarado. Se nota que temor extremo por los espíritus tiene raíz en su propia ignorancia sobre ellos. Creen que son estúpidos al interponerse en el camino del desarrollo industrial, cuando en verdad velan por el bienestar del balance del mundo al cuidar de lo terrenal. Este punto de vista se refuerza con la llegada de Ashitaka al Pueblo de Hierro de la dama Eboshi. Ahí, Ashitaka nota la armonía en el pueblo y como muchas personas que previamente vivían una vida de mala muerte o que sufrían de Lepra  (enfermedad que plagó a Japón por muchas eras y fue raíz de muchos muertos a través de su historia) fueron salvadas por Eboshi. Ella también otorgaba un rango de superioridad a las mujeres, enseñándoles a utilizar armas y confiándoles los roles más importantes y exigentes trabajando en las fábricas de hierro. A pesar del refugio que ha proveído Eboshi para tantas personas previamente desafortunadas, no minimiza sus pecados. Aquí es donde se notan dos de los temas que más toca Miyazaki en sus películas, el feminismo y la concienciación sobre los problemas del medio ambiente.
Eboshi
Princesa Mononoke
Eboshi le confiesa a Ashitaka que eliminó los bosques para poder conseguir arena para fabricar su hierro y tuvo que deshacerse de Nago, ya que él intentaba luchar contra sus intentos de destruír el bosque. Así Ashitaka se entera de su odio y falta de temor a los dioses y el hecho de que ella le disparó a Nago y ahora es perseguida por Moro, un espíritu lobo del bosque, y sus hijos. Peculiarmente, uno de sus hijos es la Princesa Mononoke, una humana criada por Moro que tiene un rencor contra la humanidad. Este rencor nace de una muy buena razón, que no diré, pero si muestra ese odio que algunos sienten por los demás humanos al saber que somos los responsables de la destrucción de todo, incluso nosotros mismos.
Ashitaka, sabiendo que la raíz del conflicto en verdad recae en Eboshi por su falta de respeto a los dioses, entonces decide conocer a la princesa lobo para lograr comprender como una diosa tomaría a una humana como su hija y por qué ella se consideraría más una loba que una humana.
Su oportunidad llega cuando ella se infiltra en el pueblo para intentar matar a Eboshi. Ashitaka se interpone en su lucha y logra salvar a ambas, pero al intentar irse del pueblo con la princesa, le disparan y está moribundo. La princesa decide llevar a Ashitaka al bosque para probar suerte porque tal vez el dios del bosque podía salvarlo. Y así sucedió, y eso fue interpretado por Moro y su clan como mensaje de que Ashitaka tení algo importante que lograr, a pesar de su maldición. Algo que me pareció conmovedor fue Yakul, el alce del príncipe, porque aún cuando fue liberado por San, él siempre se mantuvo fiel a su amo y amigo e incluso llegó a arriesgar su vida por su devoción a él, tal vez sabiendo del valor y el corazón puro de su amo. Esto de nuevo me recordó a lo increíble que son las mascotas, como dije en el análisis de Historias Mínimas.
Me gusta también como Miyazaki plantea la maldad y la corrupción en sus historias, y ésta no es una excepción. En el anime, muchas historias, especialmente ahora, tratan esos temas de la corrupción humana y de la maldad innata que tenemos en nuestro interior y algunas veces proponen al "héroe" bastante humano con cierta maldad también. En este caso, los humanos son los más corruptos con su sed de poder y sus ambiciones sin límites; está Eboshi con su necesidad de dinero, tierra y dinero, los monjes que desean probar su poder y subir es estatus social y está el emperador mismo que pide la cabeza del dios del bosque para poder obtener inmortalidad. Aunque ambos lados caen corrupción, el origen de la maldad de cada lado es completamente distinta así como sus intenciones. Los jabalíes comienzan tratando de salvar a la naturaleza y se vuelven corruptos por las balas y luego por el odio que los humanos hacen crecer en sus corazones, mientras en el lado de los humanos tomó mucho para lograr que los trabajadores del pueblo entraran en razón. Hasta después de haber matado a los jabalíes pequeños lograron entender la gravedad del asunto, mas o menos. Pero en el caso de los monjes, irónicamente, nunca comprendieron ni se rindieron aún viendo las consecuencias de sus acciones y Eboshi, sabiendo que estaba siendo manipulada, aún así intentó mostrar su poder como mujer independiente y líder y se atrevió a disparar. Así que, aunque ambos lados tuvieron sus momentos de maldad, sus razones eran muy distintas. Pero, como toda historia de Miyazaki, nos garantizó un final feliz en el que los humanos se arrepienten de sus acciones y volverán a comenzar desde cero sin dañar al medio ambiente y, aunque San y Ashitaka no pueden vivir juntos, terminan estando juntos (Miyazaki tiene una necesidad de poner romances extraños y prontos pero no molestos).
Moro y Nago
La profundidad de su temática, que es más pesada de lo usual para una película infantil, es una de las características que hizo de esta película tan popular. Esta película es de las que más logró llegar a la audiencia adulta por la manera de desarrollar la historia de manera muchos más directa. Sin embargo, crear la historia no fue tan sencillo. Miyazaki comenzó a hacer bocetos a finales de los 70s y a escribir y dibujar el storyboard a finales de los en 1994. Tuvo que adaptar sus ideas por haber utilizado elementos de la historia en Mi Vecino Totoro y por los cambios sociales que sucedieron en el tiempo que le tomó aclarar la historia en su mente. En 1995, Miyazaki junto con el animador supervisor, Masashi Ando, fue al bosque Yakushima en Kyushu, que lfue la inspiración de los paisajes para Nausicaa y también fueron a las montañas Shirakami-Sanchi por tres días con más artistas involucrados en la producción. De ahí surgió el concepto visual para el bosque del dios venado.
El concepto del Pueblo de Hierro vino de los Westerns del director irlandés-americano, John Ford. Esto inspiró su idea que se alejaba del Japón medieval y se acercaba, en cambio, a los inicios de la industrialización con minorías de rechazados en un pueblo apretujado. 
Pueblo de Hierro
También se experimentó con animación computarizada en medio de toda la animación tradicional. A pesar de solo haberla utilizado por cinco minutos de toda la película, mientras se usaron diez minutos de pintura digital, la utilización de esta técnica fue exitosa ya que permitió la animación impactante del Nightwalker y de la reacción del brazo maldito de Ashitaka al enfurecerse cuando San y Eboshi se enfrentan el el Pueblo de Hierro.
Curiosamente la película me recordó a otra de anime que descubrí hace un par de meses llamada La Leyenda del Dragón Milenario (dirigida por Hirotsugu Kawasaki y basada en la novela de Takafumi Takada) y pienso que puede que esté basada en Mononoke. Comparte las temáticas del cuidado del medio ambiente y de los conflictos entre el mundo de los espíritus y los humanos que buscan poder. Pero una escena específica me recordó a ella. El momento en que el Nightwalker corruptor crece hacia el cielo y se expande, cubriéndolo, es casi idéntica a la manera en que el dragón milenario se transforma cubriendo el cielo de agua y expandiéndose para atacar la tierra. Si tienen tiempo pueden encontrarla para compararla.
Al final, y como siempre, Miyazaki se sale con la suya al diseñar personajes impactantes y memorables como los Kodama y el dios del bosque (que a mi parecer muestra el potencial de Miyazaki como creador de seres mitológicos y como un gran dibujante).
Esta película deja lecciones importantes de maneras inolvidables y vale la pena verla, tanto que hicieron una adaptación teatral de la película. ¡Disfruten!

http://www.watchanimemovie.com/sub-dub/princess-mononoke.html

1 comentario:

  1. Al fin me dan ganas de ver la película porque suena interesante. La primera vez que intenté verla me asqueó por como Ashitaka le arranca los brazos a un hombre de un solo flechazo.

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